Wikipedia dice:
Un cíborg o cyborg del acrónimo en inglés cyborg: de cyber (cibernético) y organism (organismo), es una criatura compuesta de elementos orgánicos y dispositivos cibernéticos generalmente con la intención de mejorar las capacidades de la parte orgánica mediante el uso de tecnología.
¿Alguien tiene problemas con eso?
¿Te molestaría que alguien considerara que eres un cíborg?
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Imagen @nuno_lopes en Pixabay |
Algunas personas tienden a pensar que un cíborg necesariamente se entiende como tal cuando lleva implantados elementos tecnológicos en el cuerpo. Pero se podría debatir largo y tendido sobre eso.
En realidad, clasificaciones aparte que solo sirven para fomentar el blablablá, seamos cíborgs o seamos como quieras llamarlo, lo cierto es que nuestro sistema nervioso central, en determinadas partes del comportamiento humano, parece actuar como un ordenador. Un ordenador que, ¡cuidado!, no tiene un solo procesador, sino varios y además muy especializados. Se alojan en el cerebro. Pero además está íntimamente ligado con fuentes de información que se alojan en la totalidad del cuerpo. Un cerebro solo, moriría de aburrimiento. Necesita desde las uñas de los pies, hasta las puntas del cabello que tienes bajo el sombrero. Incluso mucho más.
Y la voracidad del cerebro es de tal magnitud que ya 3,5 millones de años atrás, empezó a sentir la necesidad de tener "periféricos de doble dirección". Ya no le bastaban los sentidos convencionales y la totalidad del cuerpo. Para alimentarse empezó a añadir periféricos a las manos y las dotó de herramientas complementarias: Una piedra rota y cortante, un palo, los dientes de otro animal, etc.
Y son periféricos de doble dirección, porque permitían nuevos usos y al mismo tiempo aprendían de ellos. El resultado es que con una simple piedra agarrada en la mano, el cerebro aprendió desde cortar pieles a encender fuego.
Si, sí, lo que estás pensado: Aunque aquellas piedras no fueran implantes, empezamos con ellas el proceso de creación de seres vivos cybernéticos.
¿Qué crees que es sino, para tu sistema nervioso central, el teléfono móvil que llevas en el bolsillo?
Tus gafas, las lentillas, los prismáticos, una silla, una mesa, una lámpara, tu nevera, el timbre de la puerta de tu casa, un avión, tu coche, nuestros barcos y barcas, la radio, la tele... el sonotone,
Todos son periféricos de tu sistema nervioso central. Y lo más maravilloso es que yo también soy un periférico complementario de tu sistema nervioso. Tu cerebro aprende del mío y yo del tuyo. Y todos juntos hemos creado otro órgano para nutrir nuestro cerebro: la red Internet.
¿Cuánto piensas que tardarás en llevar implantes en tu organismo destinados a operar más rápido, cómoda y efectivamente los periféricos de los ya dispones?
—Poco amigo. Menos de lo que supones. De hecho, ya existen, por bien que mayoritariamente son de tipología médica.
Y también hay propuestas para eliminar los teclados y simplemente dictar en vez de escribir.
Y entonces, cuando tengas que pagar para un implante, quizás ya no te moleste que seas clasificable como cíborg. Seguramente presumirás de ello, como presumían ñoñamente los primeros poseedores de aquellos teléfonos ladrillo de hace unas décadas.