Yo tenía una granja en África, al pie de las colinas del Ngong
Así empieza la hermosa novela Memorias de África de Isak Dinesen
Yo tenía un blog en Blogger, bajo el pie de las censuras de Google
Y así podría ser el epitafio bloguero, en cualquier momento, cuando a algun "estupendo de la muerte" se le ocurra que «caca» no armoniza con la hoja de estilos pulcros y judaicos cristianos de los citados señores.
Ridículo.
Ya son tres los compañeros, conocidos o saludados, que en pocos días han recibido un amable aviso en el que se les invita a «rectificar» algún contenido de su blog. A uno de ellos, al parecer, ni siquiera se molestan en informarle de cuál de las entradas debería ser revisada.
Recogiendo murmuraciones a las que no sé que crédito se les pueda dar, se habla , se comenta, se dice que si tuvieras publicidad en el blog, no te pasaría. También dicen que los que reciben estas misivas de requerimiento -como si del juzgado se tratara- son víctimas de alguna denuncia o protesta y que eso es suficiente para molestarte. Y por último; al parecer el equipo que "revisa" la decencia de contenidos, ni siquiera son empleados de Gugul. Al igual que en los foros de ayuda, son cuatro pringados que no tienen gato que peinar.
Insisto: no sé cuanto hay de cierto.
Yo por mi cuenta, le he quitado el polvo, le he dado una capa de pintura y cortado las hierbas, de mi casita en Tumblr. Por si acaso llaman a mi puerta los de la Hermandad de la Tonta Inquisición...
Pero eso de Tumblr está en otro planeta muuuuuy diferente. Se maneja muuuuuuy diferente y si hay algo que pudiera ser motivo de escándalo, lo puedes marcar previamente y solo lo verán los que quieran y previo aviso. Pero de borrar, nada de nada. Hasta ahora, solo tenía fotos, a partir de ahora, lo utilizaré en todos los modos posibles. Reconozco que tanto el editor de contenidos como el resto de las herramientas son complicados y no se asemejan en nada a los de aquí, pero oye! No es inalcanzable, todo se aprende.
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