Solo reconozco una trinidad dotada de una meritoria suficiente como para considerarse "santísima o sagrada". Y sin ánimo de ofender, creencia o devoción, esa trinidad no tiene el formato de familia con mascota. No se trata de un padre, su hijo y una paloma. Se trata de otra cosa.
A nivel popular se suele entender que fue Platón (427-347 a.C) el que se atrevió a formular estos tres puntos, sobre los cuales determinar un triángulo, como superficie donde apoyar lo correcto. Pero a mi no se me olvida que ya Safo (650-580 a.C.) un par de siglos antes ya dijo que "Lo que es bello es bueno y quien que es bueno, llegará a ser bello"
Pero seamos francos; esto, solo son "eslóganes publicitarios que quedarían de coña (bien) en una campaña para un Bufete de Filósofos, si los filósofos hicieran como los abogados y montaran sus bufetes.
El caso es que, dos milenios largos después, sigue existiendo quien intenta desdibujar el triángulo cuestionando uno u otro de los vértices.
Que si la verdad es muy relativa; que si la belleza también; que si la bondad puede que sea menos cuestionable pero no se puede olvidar la maldad y aquello tan mareado de "bondad como ausencia de maldad versus maldad como ausencia de bondad"
A lo mejor (o a lo peor) deberíamos retroceder a la más que posible virginidad (o pureza) de la mente neanderthal para simplemente entender que aquello que está dotado de belleza bondad y verdad, es llana y sencillamente "lo más deseable" sin más disquisiciones ni comidas de coco.
Apoyar lo correcto sobre la superficie delimitada por esos tres valores es reconocer esos tres valores en una cosa: Belleza contrastable, bondad contrastable y verdad contrastable. Ahora, cambia el vocablo contrastable, por verificable o comprobable. Esa cosa, ¿continúa dando a reconocer esos tres puntos? ¿Los presenta como contrastables, comprobables o verificables? ¿Si? —Entonces es correcta.
Maestro: Me emociona la contemplación de esta obra. ¿Cree usted que puedo llamarla divina?
—Solo si pretendes insultarla o mofarte de ella
Pero, no entiendo. ¿Porqué dice usted tal cosa?
—Porque esa obra han nacido de la mente de un artista que ha pretendido dotarla de una belleza que difícilmente sería negable. Su contemplación despierta en el observador sentimientos buenos y emociones positivas. Además, es tangible. La puedes medir, iluminar, analizar sus colores, su textura, su técnica y otros valores igualmente tangibles. Nada de eso se encuentra en "la divinidad" que supone la existencia de algo intangible, irreconocible y muy cuestionable.
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Perseguir la belleza o la perfección en lo denominado divinidad es una entelequia. (¿Qué habrían sido de las divinidades sin las narraciones orales y posteriores literaturas?)
ResponEliminaOcurre que cada cual tiene su propia divinidad. La mía oscila entre Julian Roberts y Scarlett Johansson. Ultimamente parece que me quedo mas con Scarlett; creo que envejece mejor.
ResponElimina[img]https://www.biografiasyvidas.com/biografia/j/fotos/johansson_scarlett_2.jpg[/img]
Hay belleza en el mundo...unas más palpables que otras jajaja
ResponEliminaUn beso.